El convertirte de freelancer a pequeño empresario va encaminado hacia la estabilidad y al crecimiento. Como freelancer puedes ofrecer tus servicios a muchos clientes, pero llegará en momento en el que te sature el trabajo porque estás tú sólo. Como empresario, puedes tener un equipo, incluso uno pequeño, para delegar algunas actividades que te permitan tener más clientes y con ello, más ingresos.
Cada vez más jóvenes deciden trabajar como freelancers, es decir, trabajar por cuenta propia, teniendo uno o varios clientes a los que prestan sus servicios profesionales de especialidad. Publicistas, redactores, mercadólogos, diseñadores, etc., son quienes más han adoptado esta tendencia.
Sin embargo, muchos han pensado en convertirse de freelancer a pequeño empresario, llevando el auto empleo al siguiente nivel: ser una empresa que también genere empleo.
¿Por qué? Pues por sus múltiples beneficios. Por ejemplo, un freelancer no tiene un pago fijo o un día de pago. Y aunque decida sus tiempos para trabajar, también es cierto que, si decide, irse de vacaciones, dejará de ser productivo en ese tiempo y posiblemente pierda algún ingreso importante.
¿Qué necesitas para dar el paso y convertirte de freelancer a pequeño empresario? Te damos algunos tips que podrían ayudarte con esta transición.
Es importante ser paciente y seguirte capacitando, pues para convertirte de freelancer a pequeño empresario es necesario que sigas acumulando conocimiento y habilidades que te ayuden a hacer crecer tu nuevo negocio.
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